diciembre 17, 2011

EL PRECIO A PAGAR POR SER FOTOPERIODISTA

Este es un artículo que reflexiona sobre las posibilidades, problemas y renuncias a las que se somete un fotoperdista. Jonathan Alpeyrie habla de su trabajo.

Página del fotógrafo: Jonathan Alpeyrie

Muchas personas en la profesión se preguntan por el estado de la prensa en el mundo cambiante de hoy. No soy la excepción a esta regla. La prensa está en transformación así como los medios sociales y las nuevas tecnologías rearman el trabajo en el cual los periodistas, fotógrafos y la prensa escrita se dedican.

Obtener publicidad no es el tema. Hacer dinero en orden de mantenerse cada día, y pagar por los proyectos venideros, es el verdadero problema. Aunque, es verdad que hay pocos magazines y periódicos que pueden sostener a periodistas para que cubran grandes historias, el periodista en cuestión debe encontrar nuevas formas de hacer dinero. Las agencias fotográficas, por ejemplo, en años recientes han usado más y más fotógrafos "in situ" que cuestan menos que enviar a su propio equipo a tierras extrañas.

Aún más, y tal vez la más importante, el valor de la fotografía ha colapsado en los últimos 20 años con el arribo de internet, que está lleno en cantidades, pero no en calidad. Polaris Images, la agencia que me representa alrededor del mundo me publica semanalmente en bases alrededor del mundo, lo cual es bueno, pero cuando recibo mi salario, la cantidad de dinero hecho en compensación por la cantidad de fotos vendidas y el monto por el riesgo que debo tomar en algunos viajes, es bastante desconcertante. Por ejemplo, China es un gran mercado para mí, en el cual al menos un 10% de mi trabajo se vende cada mes. Los chinos han devaluado el precio de la fotografía tanto como han podido, comprando cada foto a un promedio de 30$ (NV. ¿francos?, ¿dolares?) una pieza: que no sólo es muy poco, sino que la calidad y el riesgo de tomar la foto no cuenta para nada.

Y finalmente, pero tal vez lo más importante, el comportamiento de la prensa hacia sí misma, es una falla el cuestionar esta entidad, que es en mi opinión el peligro más grave. Por algunas décadas, la prensa del mundo remedió el fallo y la membresía en sus periódicos, magazines... Es fácil decir, sin embargo, que internet tiene mucho que ver con esto, así como que la gente no pague por el contenido comprando impresos, pero más allá de encontrar las noticias, ellos deben mirar a través de una propuesta infinita de websites noticiosas que ofrecen contenido gratis. De por sí una situación imposible de pelear. La prensa llega con una solución simple en orden de incrementar sus renovaciones: crean y venden contenido que las personas quieran leer y mirar. Los resultados se vieron rápidamente: la calidad de la prensa se ha volcado hacia noticias sin importancia y de poco contenido. Life magazine y Paris match son ejemplos perfectos de esta realidad.

Mi experiencia como fotoperiodista que ha estado en el negocio por 10 años, no es diferente de la realidad expuesta en los párrafos previos. Como es fácil criticar la naturaleza en lo que se ha convertido la prensa occidental, ofreceré ejemplos concretos que nacen de mi experiencia, pero que son verdad para los profesionales que, como yo, luchan por ganar dinero. En orden de reflexionar sobre esta nueva realidad, daré cuatro ejemplos de los viajes en los que cubrí grandes eventos internacionales: La guerra de las drogas en México, la guerra en Libia, el escándalo de Dominique Strauss y la independencia de Sudán de Sur. Cada uno reflejará un resultado diferente de trabajo, producción, gasto monetario y pagos financieros.

Drug war ~ México

Serie: Drug war
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Drug War. Las autoridades mantiene prisioneros dentro de la cárcel del Sheriff. La cárcel desborda por arrestos de droga, la mayoría inmigrantes ilegales de Máxico atrapados con drogas cruzando la frontera, o dentro del territorio de Estados Unidos. Un grupo de residentes en sus celdas, que deberían albergar 15 prisioneros pero hay más de 25. Muchos de estos residentes están cumpliendo condenas menores a un año. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Drug war
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Drug War. El cantante norteño camina a lo largo de la cerca fronteriza del lado mexicano. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Drug war
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Drug war. Una operación en curso montada por Metro y las fuerzas de policía local para atrapar expendedores de cocaína. Uno de los expendedores es puesto bajo arresto, antes de ser interrogado en la cárcel local. Si los policías están de suerte, él les dará su fuente, así los oficiales podrán arrestar un pez grande. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Drug war
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Una "mula" arrestada dentro de las ollas al contrabandear, con la ayuda de otro contrabandista, cerca de 1.000 libras de droga a los Estados Unidos. © Jonathan Alperyrie


Serie: Drug war
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Drug War. Una vista de la cerca que separa los Estados Unidos de México justo a  la salida de Nogales. © Jonathan Alpeyrie

La guerra de las drogas en México, desde 2006, se ha convertido en una gran historia internacional, que de vez en cuando es cubierta por la prensa internacional. En mi opinión no lo suficiente, pues se ha convertido en una verdadera guerra civil con implicaciones internacionales. En marzo de 2011, decidí cubrir esa guerra no-hablada en la frontera entre México / Arizona en el cruce de la ciudad de Nogales. Por tres semanas, trabajé con policías de ñas fuerzas anti-drogas de Estados Unidos (Metro) que peleaban con los carteles de la droga. También crucé al menos una docena de veces a México a cubrir la historia de ese lado. Estuve peligrosamente cerca de uno de los carteles fotografiando su vida cotidiana y algunos de sus miembros. Me sentí preocupado y paranoico allí más que en otras guerras en las que he estado. Cuando la historia estaba completa tres semanas después, corté mi estadía y sentía que era seguido, la policía estadounidense lo confirmó y me fui. El nivel de riesgo de hacer esta historia nunca fue pagado completamente financieramente. Todos los gastos incluyendo un periodo de tres semanas llegó a 2.500$. Polaris y yo fallamos en vender esta historia por su valor. Creo que apenas hice 1.000$, por lo que perdí 1.500$ en este viaje. El interés nunca estuvo allí, aunque tenía un acceso excelente. En un sentido puramente financiero, el viaje fue un fracaso.


La guerra en Libia


Serie: Guerra en Libia
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
NATO golpeó hacía 10 días la retirada de la Armada de Kaddafi después de haber fallado retomando Benghazi, destruyendo muchos tanques y camiones. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Guerra en Libia
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Tropas rebeldes habían asaltado por ellos mismos una artillería llegando muchos a emergencia: 2 muertos y 16 heridos. Muchos en emergencias tenían serias quemaduras. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Guerra en Libia
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Las fuerzas de Kaddafi había bombardeado la ciudad de Ajdabiyah, mientras algunas fuerzas en tierra hacían lo posible para impedírselos. La primera línea en Brega fue abandonada así que los rebeldes pudieron entrar a la ciudad y defenderla de potenciales ataques. Los rebeldes empujaban desde las primeras líneas. Este camión se mueve cerca a la ciudad para tomar una posición defensiva. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Guerra en Libia
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Fuerzas rebeldes habían tomado posiciones defensivas a 40 kms de las fuerzas de Kadaffi en Brega. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Guerra en Libia
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
La Armada de Kaddafi atacó la refinería de petróleo Al Srir matando a cuatro rebeldes, hacía cuatro días. Uno de los cuerpos es enterrado mientras miembros de su familia dicen el último adiós. © Jonathan Alpeyrie

La guerra en Libia, se convirtió rápidamente en una historia internacional, que fue cubierta por todo el mundo que quería hacerse un nombre por sí mismo. Para mí, era un conflicto más que cubrir. Fui enviado allí en asignación por Polaris Images, la BBC y algunos magazines franceses. Cubrí el conflicto en la primera línea de Ajdabiya por dos semanas antes de volver a Túnez. El nivel de riesgo era ligeramente alto, con bombardeos y casualidades... cada día corría hacia la primera línea y cada día volvía a mi hotel para archivar las historias. Después de dos semanas en esa rutina, había gastado cerca de 2.000$, entre hotel, carro, arreglos y comida. Sin embargo, el pago por esto fue bastante diferente a la experiencia mexicana. Entre abril de 2011 y hoy, he hecho cerca de 3.300$. Para mí, fue un bueno viaje y además exitoso.

La Independencia de Sudán del Sur

Serie: Independencia de Sudán del Sur
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Independencia de Sudán del Sur. La mayoría de los SPLM se encuentran entre las tropas. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Independencia de Sudán del Sur
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Independencia de Sudán del Sur. Muchas tribus del norte de Sudán del Sur habían llegado a Juba para tomar parte en la celebración de la independencia en julio 9, 2011. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Independencia de Sudán del Sur
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Independencia de Sudán del Sur. Un grupo de locales celebrando. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Independencia de Sudán del Sur
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Independencia de Sudán del Sur. El día de la Independencia había llegado, cientos se congregaron en Juba para tomar parte en la celebración que daba nacimiento a la nación número 196 en el mundo. Una unidad SPLM se para enfrente del presidente de Sudán del Sur y la multitud. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Independencia de Sudán del Sur
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Independencia de Sudán del Sur. El día de la Independencia había llegado, cientos se congregaron en Juba para tomar parte en la celebración que daba nacimiento a la nación número 196 en el mundo. Una tropa del SPLM saluda mientras pasan las unidades armadas durante el desfile. © Jonathan Alpeyrie

La independencia de Sudán del Sur, fue una historia que quería cubrir desde hacía mucho tiempo. Fue allí por dos semanas en julio de 2011. El acceso al país era difícil y caro. Teníamos que ir a través de Kampala, Uganda. En un periodo de tres semanas ¡gasté 4.500$! Aunque esta historia estaba bien cubierta por la prensa internacional, falló en obtener la atención que estaba esperando. Fotografié para algunos clientes, como Africa Internactional, grupos de crisis International, Polaris y otros. Nunca recuperé los gastos a través de las ventas, sólo de 2.800$ en total. La prensa internacional perdió interés muy rápido y se movió a algo más una vez el país fue oficialmente independiente en julio 9 de 2011.

La historia de Dominique Strauss Kahn

Serie: Caso Dominique Strauss Khan
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
DSK y su esposa Anne Saint Claire caminan hacia la corte. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Caso Dominique Strauss Khan
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
El Sr. Brafman  sube las escaleras de la corte criminal cerca a Wall Street. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Caso Dominique Strauss Khan
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Anne Saint Claire y su hija caminan afuera del edificio de la corte luego que su esposo fue puesto bajo fianza. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Caso Dominique Strauss Khan
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Diallo y su abogado Kenneth Thompson entran al edificio de la DA. © Jonathan Alpeyrie


Serie: Caso Dominique Strauss Khan
Fotografía por: Jonathan Alpeyrie
Una mucama trabaja en el piso 11 del hotel, limpiando las últimas habitaciones. © Jonathan Alpeyrie

Y finalmente, pero no por último, la historia de Dominique Strauss Kahn. Cubrí la historia para Polaris cada días por las dos primeras semanas en junio. Esta historia se convirtió rápidamente en un dolor de cabeza para mí, al tener que lidiar con paparazzi, algo perturbador para mí. Después de volver de Sudán a comienzos de agosto, Polaris me puso en caso una vez más por al menos dos semanas más, hasta que les dije que había terminado con eso. Los resultados excedieron todas mis expectativas, Vanity fair, VSD, Bild en Alemania, y muchas otras publicaciones escogieron mi trabajo. Desde el momento en que empecé con esta historia en junio hasta ahora, he recolectado más de 5.000 dólares, casi sin gastos. Aunque es bueno recibir esta cantidad de dinero para realizar proyectos más serios e importantes, estaba feliz cuando terminé y Strauss Kahn volvió a Francia, donde pertenece. Esta historia también me prueba que la prensa ama esas historias jugosas, que tienen, por supuesto, implicaciones sexuales o políticas. Claro que la caída del potencial presidente de Francia era en sí mismo un problema crucial para Francia, y era necesario el cubrimiento de los medios. Sin embargo, el contenido sexual hizo esta historia aún más sórdida. Y sobretodo, mi impresión final de esta experiencia fue que, el mundo occidental, y las que llamamos corporaciones intocables de prensa una vez más se han comportado sin clase, destruyendo la reputación de lo que está en los ojos del resto del planeta: una reputación decadente.

Via / LLDLP